Esta semana os traemos «El marciano» escrito por Andy Weir y una de los novelas que más nos ha gustado en los últimos años, tanto, que la habremos leído unos 6 o 7 veces.
Escrita en parte de modo de diario, narra las peripecias del astronauta Mark Watney integrante de la misión Ares III a Marte y que por una fatal cadena de sucesos se ve abandonado a su suerte en el planeta rojo.
Desde ese momento la vida de Watney se convierte en una maratón para sobrevivir hasta el momento en el que la NASA pueda enviar una misión de rescate, y eso puede tardar más de un año.
Pero lo mejor de todo es que el autor emplea la ciencia para resolver los problemas a los que nuestro astronauta se enfrenta, nada de cosas como conseguir agua «porque sí», en absoluto, nos describirá de que manera Watney la consigue a partir de lo que tiene a su alcance. Y ese es sólo un ejemplo.
En definitiva, Weir construye un Robinson Crusoe mezclado con Apolo XIII en un ambiente 1.000 veces más hostil y con la soledad aplastante de saberse solo en un planeta a millones de kilómetros del ser humano más cercano.
Y si sólo has visto la película ya estás tardando en ir a la biblioteca a por el libro o a comprarlo a tu librería habitual. No hace falta que después de leerlo nos des las gracias.
Seis días atrás el astronauta Mark Watney se convirtió en uno de los primeros hombres en caminar por la superficie de Marte. Ahora está seguro de que será el primer hombre en morir allí. La tripulación de la nave en que viajaba se ve obligada a evacuar el planeta a causa de una tormenta de polvo, dejando atrás a Mark tras darlo por muerto. Pero él está vivo, y atrapado a millones de kilómetros de cualquier ser humano, sin posibilidad de enviar señales a la Tierra.
De todos modos, si lograra establecer conexión, moriría mucho antes de que el rescate llegara. Sin embargo, Mark no se da por vencido; armado con su ingenio, sus habilidades y sus conocimientos sobre botánica, se enfrentará a obstáculos aparentemente insuperables. Por suerte, el sentido del humor resultará ser su mayor fuente de fuerza.
Obstinado en seguir con vida, incubará un plan absolutamente demencial para ponerse en contacto con la NASA.
«El marciano» ha sido editado por NOVA en formato tapa blanda con una extensión de 408 páginas. Traducido por Javier Guerrero.